España es el segundo país de la Unión Europea cuyos ciudadanos muestran mayor preocupación por los posibles riesgos del uso de la autenticación biométrica a la hora de acceder con seguridad mediante la tecnología a sus datos personales, con un porcentaje del 55 %, frente al 45 % de media en la UE.
Así se recoge en un estudio recién publicado por la multinacional IBM sobre tendencias de seguridad, “IBM Security Future of Identity”, con más de 4.000 entrevistas a ciudadanos en todo el mundo, cuyas respuestas desvelan además la preocupación de los españoles por que la autenticación pueda fallar, con una tasa del 53 % de los entrevistados frente al 43 % en el resto de la UE.
Jordi Busquets, director técnico de IBM Seguridad en España, ha destacado “la desmitificación” que demuestran los datos respecto a la supuesta preferencia que otorgarían los usuarios a la comodidad frente a la seguridad, y que no es así.
De hecho, el 70% de los encuestados da prioridad a la seguridad en el acceso a aplicaciones como las financieras y las de compra digital, frente al 14 por ciento que menciona la comodidad como lo fundamental, explica.
Sin embargo, en el acceso a las redes sociales, el 36 de cada cien prefieren la comodidad, el 34% y el 30% la privacidad. “Parece que no existe concienciación todavía”, añade.
A nivel internacional, el 67 % de los usuarios se siente cómodo desde el punto de vista de la seguridad en el acceso a sus aplicaciones con el uso de tecnologías biométricas (lectura de huella dactilar, escaneado de retina y reconocimiento facial o de voz). El 44 por ciento considera los lectores de huella dactilar como uno de los métodos más seguros de autenticación.
El estudio arroja una diferencia evidente por edad, mientras que los “millennials” (la generación que va de los 20 a 36 años) se siente cómodo con este tipo de tecnologías, cuando la franja de edad va más allá de los 50, la confianza disminuye considerablemente.